miércoles, noviembre 22, 2006

A ti Rosita

Se fue, el lunes pasado, mi abuela decidió marcharse, y lo hizo, en paz, con la calma que da la edad, la calma de saber que ha cumplido sus metas, objetivos alcanzados, y el alma limpia.

Sus 5 hijos, 11 nietos, 4 biznietos la recordaremos siempre.

Era la única abuela que conocí, a la paterna no tuve la suerte de conocerla y vivirla.

Gracias a la malaria adelante mi regreso, planeado para el 24 de noviembre y por esas cosas de la vida, he podido disfrutar de ella 2 meses, abrazándola, besándola, viviéndola, dándonos amor y cariño recíprocamente.
Se fue con 89 años a sus espaldas, pero nos dejó un gran legado, el que da la sabiduría y la experiencia de los abuelos.
Será la debilidad que uno tiene por los abuelos en general, por ese sector de la sociedad olvidado, incluso por propios familiares, unas PERSONAS, a quienes se lo debemos todo, empezando por la vida.Me revela, me cabrea sumamente el pasotismo que muestra la sociedad, los gobernantes que desgobiernan, considerándolos un lastre para la sociedad porque no son rentables, son deficitarios... y yo digo... “ y una mierda!!!!” dan mucho, muchísimo, desde la experiencia nos apoyan, nos aconsejan, nos consuelan, nos quieren.... hay que cuidarlos, acompañarlos, abrazarlos, respetarlos y quererlos, si, quererlos como si cada día fuese su primer día de vida, hacerlos sentir especiales, importantes... porque lo son.

De mi abuela.... infinidad de recuerdos y momentos, meriendas los viernes por la tarde al salir del cole, bandejas de macarrones, canelones, arroz, lomo con pimientos en cazuela de barro, a la antigua usanza, como solo saben hacer las abuelas, flanes, crema catalana que hacía como nadie, las tardes y noches en el bingo... su único pequeño “vicio”... donde disfrutaba como una niña, la niña que nunca dejo de ser, su devoción por San Antonio, sus lagrimas brotando al escuchar las notas de las canciones de los Panchos o Julio Iglesias, sus tardes tomando el sol en el jardín de Lizaso (Navarra), partidas de canasta, los agradecimientos junto a ella después de las campanadas de fin de año, los brindis y el “chin chin” que tanto odiaba, su pasión por el Real Madrid sin entender que yo pudiera ser del Barça, disfrutando con los dulces de cabello de ángel y merengues de Valls... me emociono recordando todos esos momentos...

Pero sobre todo, el amor y el cariño que daba a raudales, colmó de amor y cariño a los que la rodeaban, contagiaba con su alegría y vitalidad, su hospitalidad y hacer sentirse de casa al conocido o extraño.

Siento tristeza y pena, pero lleno de paz y calma, tuve la enorme suerte de pasar su ultima noche con ella, arropándola, cuidándola, dándole todo mi amor y cariño, sé que es ella la que me ha dado la paz y calma que siento, algo que llegó asustarme, pero de lo que me siento afortunado y guardo en mi corazón como el mayor de los pocos tesoros que poseo.

Estas son las palabras que le leí el día de su despedida:

"Rosa Figuerola Blasi, Rosita, el destino y la providencia han querido que yo estuviera aquí, para poder decirte adiós, en nombre de los que te hemos querido y te queremos.

Ayer por la mañana, emprendiste el viaje hacia la vida eterna y poder reunirte con Nuestro Padre y lo hiciste de puntillas, esperando a que el día ya hubiese arrancado, para no molestarnos mientras dormíamos...

Aquí, en la tierra, junto a tu esposo Pedro, viviste mas de 50 años de feliz matrimonio, fruto del cual, nacieron vuestros 5 hijos, José Javier, Mª Rosa, Laly, Pilin y JuanPedro... los viste crecer, entre valls, montblanc, tarragona y navarra y viste como se casaban con Kamy, Javier, Luis, Juan y Elisabeth.
De tus hijos vinieron nietos...Alejandro, Juan Ramón, Patxi, Buti, Gorka, Emma, Elena, Ana, Juan, Borja y Alvaro y de ellos vinieron biznietos... Maria, Lucia, Ana, Javier y dos que están en camino....

Rosita, no te has ido...no... estas aquí, sigues y seguirás entre nosotros, porque nos has llenado, el corazón.... y el estomago también... porque nos has querido, porque nunca has dejado de enseñarnos valores tan importantes como la familia y la fe, por que nos has enseñado a vivir la vida...con sus triunfos y fracasos, porque nos has colmado de amor, mucho amor y cariño, mucho cariño... sigues y seguirás en nuestro corazón, con tu alegría, tu vitalidad, tu fuerza de voluntad, tu espíritu de sacrificio, tu sonrisa.

Rosita, ten por seguro que vivirás en nosotros el resto de nuestras vidas. Tu familia y amigos te recordaremos en cada paso y sé que desde ahí arriba nos guiaras y nos protegerás como hiciste aquí hasta él ultimo día.

Rosa T,estimem."


sábado, noviembre 18, 2006

Calcuta

Nunca me habían gustado las ciudades grandes... vivo en una ciudad de unos 115.000 habitantes, no se porqué pero no me gustaban las grandes urbes, toneladas de asfalto, ladrillos, metal, y personas a puñados.


Pues bien, eso ha cambiado, o eso creo... vamos... que lo que si sé es que hay una ciudad y no pequeña precisamente que me encanta, Calcuta, Kolkata.Si, Kolkata... me encanta, me enamoró, me cautivó, me envolvió, me atrapó.

Exactamente no sabría decir los millones de personas que viven en Kolkata, oficialmente 14 millones, extraoficiales 20 millones... entre lo uno y lo otro... 17 millones... ni pa ti ni pa mi.... Durante el tiempo que viví en esta ciudad, me sentí como pez en el agua... y tenía mis miedos... pasaba de un “pueblecito” a una de las ciudades mas pobladas y con mayor densidad de población en el mundo.

Desde el primer momento, fui yo quien marco la bases de la relación, sin dejar que fuera ella quien llevase la voz cantante, en cierto modo “domine” a la ciudad, dejando que ella me enseñara, pero sin dejar que mandara sobre mi.


Sudder Street, no deja de ser una pequeña burbujita, dentro de Kolkata, donde se hospedan la mayoría de voluntarios y cooperantes, sin la cual, seguramente todo sería diferente, siempre he dicho que me recordaba a una serie de televisión, o un show de Truman, donde todos se conocen, te dan los buenos días, Gopal esperando en la esquina para ir a desayunar, Raju y Parbesh los taxistas charlando de sus cosas, los camareros del Ioios, en la esquina del chai y salamandra trabajando, Mohamed sentado en su rickshaw esperando clientes que nunca llegan y te ofrece su campanilla que usa de claxon...(...y van 236...es un cachondo...) el Tiru que a las 9 de la mañana ya ha preparado todo para servir comidas, y no sabes como, acabas con el periódico debajo del brazo... como siempre te han obligado a comprarlo... 2 rupis..., los Indra en Hotline Services (..el ciber..) la peluquería, que es peluquería y algo mas...

Pero eso solo es Sudder, cuatro calles dentro de la gigante Kolkata, a partir de ahí... New Market, Esplanade, Maidan, el barrio musulmán de camino a la Mother House, Bose Road, Hoaraw, su puente, la estacion, mercado de las flores, Litali market, park circus, el barrio de los escultores, el Victoria Memorial, Jardín botánico, la estación de Sealdah, el barrio de Kalighat, el barrio rojo y New light, Dapha, Dum Dum, Park street.....y seguiría y seguiría... aunque si dijese que la ciudad es bonita mentiría... es fea de cojones... pero como se diría aunque suene a típico tópico... por dentro es preciosa...


Todos y cada uno de los lugares de esta ciudad me hipnotizaron, si describes la ciudad, a cualquiera se le quitan las ganas de poner los pies... calles repletas de gente, coches, taxis, autobuses azules y rojos, moto-rickshaw, bici-rickshaw, rickshaw, motocicletas, perros, el tranvía, rebaños de cabras, un polución y contaminación que no creo que cumpla con los compromisos de Kioto, y la contaminación acústica que no cumple ningún compromiso ni nada, el claxon es patrimonio nacional... (...en un trayecto de 4 minutos en taxista lo hizo sonar 97 veces...) aceras en pésimo estado, asfalto arrugado por el calor, temperaturas de 35 a 45 grados con mas de 95% de humedad, suciedad y basura a cada paso, los monzones y el agua por las rodillas, cuervos...

Todo eso, son... daños colaterales?... sinceramente, acabas por “acostumbrarte”, y todo lo que te dan sus gentes lo suple, sentado en la calle saboreando un chai, charlando con un indio mientras 15 te miran fijamente, en el autobús repleto de gente cantando para todos ellos aunque no se enteren y les importe un carajo quien es un tal Sabina, regateando al del rickshaw, corriendo y jugando con los niños de la calle....


y las miles de sonrisas que recibes al día...y la emocionante ilusión cuando junto con Andrea y su proyector haces el pase de unas de esas interminables películas de Bollywood en la calle, al mas puro estilo cine de verano, en Prem Dan o Kalighat...


....paseando por sus calles, perdiéndote por ellas y en cada rincón descubrir un universo que sentía tan lejano y ahora esta tan cerca, que te asusta tocarlo con las manos, pero es ese universo el que te agarra y no te suelta.





Cuando eres feliz, te gusta lo que estas haciendo y te sientes lleno, no te importa haber perdido 10 Kg, que una rata husmee tu pie, que el agua te llegue a las rodillas, llevar comiendo vegetable-egg-nodels 4 meses y darte cuenta que los has aborrecido y te pasas los nodels-nepali-choodnei...(...spaguetis con tomate...) 4 meses mas... que el claxon te suene constantemente detrás de la oreja...


Encontrarte con tu nueva familia, con los tuyos, en el ciber, en el tiru o en la terraza, esos que no sabes como, poquito a poco se han metido en tu corazón y se convierten en hermanos y hermanas.




















Acabas dandote cuenta que lo mas importante son las personas, que ellas hacen que un lugar en concreto sea especial y te enamore... esas personas que llevo en el corazón y han hecho que ame Calcuta, una ciudad, un todo que te engancha sin saber como, pero que me encanta, y yo... yo no busco un porqué... por que ya esta bien así...de la que no paras de recibir y buscas la mejor manera de dar, una sensación de sentirte uno mas, de no sentirte extraño, es tu casa, es Kolkata

martes, noviembre 14, 2006

Por qué?


¿Por qué el pan de molde es cuadrado, si el chóped, salami,mortadela...son redondos? ¿Quién tiene la culpa de esto, lostranchetes?

¿Por qué, cuando te duele una herida, siempre llega alguien que te dice: ¿Te duele? Eso es que se está curando...Que me imagino a Jesucristo con los clavos, y la Virgen: ¿Te duele? Fenomenal, en tres días vas a estar como nuevo....

¿Por qué en las películas de miedo siempre aparece una puerta cerrada de la que sale mucha luz por las rendijas? ¿Qué hacen los espíritus ahí detrás, fotocopias?

¿Por qué en las iglesias ponen pararrayos? ¿No las protege Dios? Un poquito de confianza, ¿no?

¿Por qué abrimos la boca cada vez que miramos al techo?

¿Por qué si nunca usamos las páginas amarillas, cuando las ves en el portal te pones contentísimo y, de hecho, piensas en cogerlas todas?

¿Por qué cuando nos sonamos los mocos abrimos el pañuelo y miramos lo que hemos echado? ¿Qué esperamos encontrar? ¿Berberechos?

¿Por qué cuando nos cuelgan el teléfono nos quedamos mirándolo como si el teléfono tuviera la culpa?

¿Por qué cuando nos llaman al móvil sentimos la necesidad irrefrenable de ponernos a andar de un lado a otro?

¿Por qué cuando estamos en un lugar alto nos obsesionamos con ver nuestra casa? "Mira, mira ahí, al lado del edificio rojo...".

¿Por qué cuando echamos una carta al buzón no podemos evitar mirar por la ranura e investigar qué hay dentro?¿Qué esperamos encontrar?¿Un cartero enano?

¿Y por qué abrimos los ojos cuando estamos a oscuras?¿Qué creemos?¿Que tenemos superpoderes?

.¿Por qué nos hace tanta gracia que se nos quede la marca del reloj cuando nos ponemos morenos en verano, que en cuanto lo vemos se lo decimos al de al lado? "Mira, se me ha quedado la marca, parece que llevo reloj, pero no"

¿Porqué cuando un aparato eléctrico no funciona no se nos ocurre otra cosa que apretar con más fuerza el botón de encendido?

¿Por qué cuando alguien se va a poner gotitas en los ojos abre la boca de esa manera tan extraña? ¡Es colirio, no tequila!!!!!!

¿Por qué Espinete iba todo el día en pelotas y para dormir se ponía el pijama...?

jueves, noviembre 09, 2006

Espera... que te cuento...

Es curioso lo que da de si algo como: La Espera.
Esperando, en todas y cada una de las definiciones, las 7 que nos da el diccionario, una espera que no se limita únicamente a su aspecto temporal concreto, sino a la espera en si.

Esperamos en la cola de la compra con el numerito en la mano a que nos den la vez, en la consulta médica sin saber a donde mirar, en el atasco dentro de esos ataúdes de metal cagándonos en los políticos de turno y hurgando en la nariz, esperando a que el semáforo cambie de color y que muchos peatones ignoramos, esperamos los resultados de unas pruebas, de exámenes, de una sentencia judicial, de resultados electorales, de una entrevista de trabajo, esperamos esa llamada, ese mensaje, ese mail que a veces nunca llega, esperando el mejor momento para pedir matrimonio, esperando el mejor momento para tener hijos, esperamos en el andén a que llegue nuestro tren que a veces nunca llega, en los malditos aeropuertos y sus controles de inseguridad, esperando un beso, un abrazo y aún así por mucho tiempo que transcurra, seguiremos esperando en infinidad de situaciones y momentos.

En muchas ocasiones, aún sabiendo lo que hay detrás de ese compás de espera, sabiendo el resultado, nos aferramos a la idea de que el respuesta cambie por arte de magia, cuando sabemos que no sucederá... es cuando la espera metamorfosea y se convierte en esperanza.

Como decía Sabina...
“...esa sala de espera, sin esperanza...”

Esperamos a que algo suceda, para que nuestra mente y corazón levanten el puño y se pongan en pie de guerra, aunque a veces lo hagan sin esperar a nada ni nadie.

Hay esperas que nos paralizan, como si el tiempo se congelase, donde lo único que se hace es esperar, y a la pregunta “¿qué haces...?” la única respuesta es “...esperar...”

Existe esa espera, que nos permite seguir a nuestra marcha, pero que todo lo relativiza en función de esa espera, que ni nos permite hacer planes ni proyectos, ni estar tranquilos y en paz, porque estamos a la espera de un si o un no, de blanco o negro, de arriba o abajo, esperando esa señal que a veces, ni es señal ni es nada y la espera se torna eterna. Una espera que nos come por dentro, de la que no somos concientes, pero esperamos.

La espera, en esta sociedad que vivimos, esta marginada, se considera una perdida de tiempo, un tiempo que no va a ninguna parte, y no se va a recuperar, enemiga, dolorosa, pero no creo que sea así... si esa espera se aprovecha, se goza, se vive, nos aporta mucho mas de lo que nos pensamos, pero a la velocidad a la que va este tren en el que casi esta prohibido esperar... pero quien dijo imposible...

Un día, con Sonia, sentados en un banco, me preguntó qué hacía, mi respuesta fue, “fumar”, estábamos en Calcuta, un lugar donde la espera y el tiempo es diferente.
Unas de las respuestas que le podía haber dado, era “...nada...” “...esperar...”, pero no, mi respuesta fue “...fumar...”, supongo que porque ya había arraigado en mi ser el compás que marca la vida en India, impregnado del “tora, tora... shanti shanti...” o como sucede en centro-américa y sur-américa “...al suave...” el “...ahorita...”, había aprendido a darle sentido a esa espera, intentando entenderla, dándole el valor que tiene...

Ahí, en ese momento me di cuenta, que algo había cambiado, que a la espera la miraba con otros ojos y no la sentía tan adentro, ya no era enemiga, ni inquietud, ni intranquilidad, ni tiempo que se va, ni decepción o disgusto... no... era mi amiga, y ahí andamos... conociéndonos...

Supongo que todos en la vida esperamos algo, a alguien, un porque, un donde, un cuando, un como, incluso esperamos algo de la Vida.
La Espera, algo que siempre nos seguirá y nunca nos podremos desprender de ella, pero si podremos aprender a convivir con ella de la mejor manera posible o al menos...

...eso espero....


martes, noviembre 07, 2006

Golfo

Hoy recibi una triste noticia, un ser muy querido por una amiga, le ha dicho a su corazón que parase de latir.

Se trata de Golfo, un ser increíblemente gracioso, un poco autista, independiente, como le llama su “mami” un poco gitano, un ser protector, nada egoísta que se lo consentía casi todo a su hermano Jasp, que buscaba su rincón para descansar sin molestar a nadie, despistado, capaz de hacer cola esperando su turno, con la habilidad de mear haciendo el pino, un glotón, un dormilón, un ser que se hacía querer.

Nunca he tenido animales...para eso ya estoy yo... y conocer a Golfo y Jasp, me enseñó a que esos pequeños seres, forman una parte muy importante en la vida de las personas, incluso a para mi... han conseguido ocupar un huequecito en mi corazón, porque sienten, respiran, sufren, se alegran... viven y dan vida.
Golfo era muy importante para mi amiga, y lo siento mucho, y estoy triste por él y sobre todo por ella, porque se que es un momento difícil, para el que nadie nos prepara, pero queda el consuelo que su “mami” le dio todo el amor, y fue mucho.

Golfo sigue aquí.

A ti Gordito.

miércoles, noviembre 01, 2006

Con M.





Si, con M, M, de Monzón, de Mosquito, de Malaria...
La suma de los dos primeros elementos, en muchos países tiene un resultado: Monzón + Mosquito = Malaria.

La estancia en Calcuta durante los meses de monzón (julio, agosto y septiembre) conlleva el riesgo de contraer algún tipo de enfermedad que difícilmente podría contraer en España, tipos de enfermedades, para los que no hay vacuna: Malaria, Dengue, Disentería... en el caso concreto de la malaria, lo único que existe, son tratamientos preventivos (savarine, lariam, paludrine, malarone...) pero este tratamiento prolongado durante mucho tiempo ( 7 meses en mi caso) puede conllevar consecuencias peores para el hígado.

La conclusión de todo, es que el que escribe, no tomó ningún tratamiento preventivo, únicamente repelente antimosquitos, sobre todo durante las horas de mayor riesgo de picadura del mosquito que transmite la malaria, el Anofeles, durante el amanecer y el atardecer, una picadura cuyo factor esta determinada a la probabilidad, a que el mosquito en cuestión, esté infectado de malaria.

Todo empezó un 27 de Agosto, andaba uno en el ciber, pasando la tarde entre amigos, con Choko y Gopal viendo la carrera de formula 1.
Poco a poco empecé a sentir esa sensación de malestar cuando la temperatura corporal empieza a subir, el simple roce de la ropa produce un escalofrío, sudores repentinos... finalizada la carrera (...Alonso rompió el motor...) con la fiebre apoderándose de mi cuerpo y el “disgusto” que me dio F. Alonso, me fui a mi habitación, a la 18, la eterna 18.

Cuando uno lleva 6 meses en un lugar como Calcuta, se convierte en medio enfermero, medio médico, medio psicólogo... así que, la primera acción de choque fue atacar la fiebre con una dosis de Parecetamol... (...una gran amiga me abroncaba por automedicarme... pero... tenia que hacer algo!! .... pero tiene razón... no hay que automedicarse... ya lo dice el Ministerio de Sanidad...) en fin, que a base de Paracetamol ataqué la repentina fiebre, pensando y deseando que a la mañana siguiente, ésta hubiese desaparecido...
... No, no desapareció, se animó, y al día siguiente, mi temperatura corporal ya no era de 38,5 grados... se había animado... era de 40 grados.... Ya con la recomendación de mi vecina Robin (enfermera) seguí con el “tratamiento” de paracetamol....
El tema transcurrió como sigue....
.... en la habitación recluido, estuve peleándome con la maldita fiebre, únicamente atacada a base de paracetamol, tras la ingesta del tratamiento esta disminuía, pero al poco... de animaba de nuevo... la temperatura de mi cuerpo podía pasar en cuestión de una hora de 37,5 a 41.
Durante cuatro días, el “terremoto” que se estaba produciendo en mi cuerpo era de gran escala, la fiebre de 40-41 provocaba, un dolor de cabeza brutal, como nunca antes había tenido, un dolor incesante, como diez martillos percutores taladrando al unísono mi cabeza, ganas de vomitar constantes (... me ahorraré los detalles... ) mareos, una debilidad absoluta (... a caso me había caído de un quinto y no me había enterado...? o 3000 rickshaw me habían pasado por encima...?...) era incapaz de levantar peso, el dolor muscular no lo entendía... igual que no entendía, los delirios, pequeñas alucinaciones, cuando crees que te vas a quedar gilipollas, o que algún tornillo se suelte (...aunque alguno quizás ya lo esté...) los momentos en que la fiebre azotaba mi cuerpo y éste no paraba de tiritar, sin control, sin sentido, a las 3 de la mañana o a las 5 de la tarde, cuando el dolor de cabeza era tan intenso que no me dejaba dormir y salía a la terraza, hacernos compañía, cuando tras la ingesta de la dosis de paracetamol mi temperatura bajaba de 41 a 38 grados, con la consiguiente sudada, camiseta y colchón empapados....

....finalmente y tras cuatro días eternos sin entender que le sucedía a mi cuerpo, que día a día perdía kilo tras kilo, y tumbado en mi cama de la 18, con las puertas abiertas a Ella, la terraza, y a mas de 41 grados corporales y 35 ambientales, apareció la figura de Robin... mis palabras fueron... “...Robin, estoy fatal, la fiebre no me baja, estoy a más de 41...” me preparó unos trapos con agua fria para bajar la temperatura y me recomendó hacerme unos análisis.... el mismo jueves por la tarde y tras la ayuda de Anne y los Indra, me acompañaron Cristina y Gabi hacerme los análisis, análisis de Malaria.
El viernes 1 de septiembre, sobre las 14.00 me acompaño Sonia a recoger los análisis, el resultado: Malaria. Tipo: Plasmodioum Vivax. Sinceramente, no me sorprendió mucho y creo que mi reacción me sorprendió incluso a mi. La noticia la compartí con Sonia, estuvo ahí conmigo, apoyándome... luego... al ciber, con los mios, Ane, Raj, Andrea, Gopal, Cristina, Mayte, Choko, Gabi... todos me apoyaron, en cuestión de horas la mitad de Sudder era conocedor de mi malaria... a 7000 Kilometros de mi casa, me sentía en casa, arropado, cuidado, recibiendo amor por los cuatro costados, ánimos, atenciones, nunca lo olvidaré.

Esa misma tarde, dejé la 18, para ir a casa de Raj (los Indra) familia de Calcuta, con quien vive Ane (... incomparable enfermera y mejor persona...) nos acompañó Andrea (... puro corazon...) quien estaba con gripe, así que montamos un pequeño hospital de campaña en casa de los Indra.
Alli, Ane me dio el tratamiento adecuado para combatir la malaria, Fansidar, tres pastillas tomadas de golpe. La reacción que produce este tratamiento depende de cada persona, mi reacción fue la siguiente (..según me contaron Ane y Andrea...) :
....la fiebre subió a 40.9 grados, mientras Ane y Andrea me daban baños con paños de alcohol, mi cuerpo tiritaba sin control, mis dientes parecían castañuelas, lloré, lloré sin saber porque, sin control, las lagrimas brotaban de mis ojos (..supongo que fruto de la impotencia de no poder controlar tu organismo...) un tremendo huracán se había desencadenado, pobre cuerpecito mío, menudo meneo!!! Fueron 2 horas, 2 horas duras, eternas, de acojone, que jamás desaparecerán de mi memoria.

El Domingo 3 regresé a mi habitación, la 18, la fiebre había disminuido, pasaron 4 días hasta que el jueves 7 de septiembre me desperté sin fiebre. Eso si, durante esos doce días, interminables días, se quedaron en el camino 7 kilos, que sumados a los 8 perdidos en los meses anteriores hacían un total de 15 (... Alvaro, 187 centimetros de altura, 6 de marzo 84 Kg........... 8 de septiembre 69 Kg....)
Débil, delgado, agotado... adelante mi vuelo de regreso a España 2 meses y el 20 de septiembre aterrice en Barcelona. A día de hoy, estoy esperando los análisis que me hice aquí en España, para saber si quedan restos de malaria en mi cuerpo, esperando que no se produzcan nuevos brotes. Mi peso actual es de 77 Kg.

Esta es mi historia, mi relación, mi experiencia con la malaria, este es mi agradecimiento a los que estuvieron conmigo: a Sonia, a Ane, a Raj, a Cristina, a Andrea, a Robin, a Maria, a Mayte, a la familia Indra, a Choko, a Gabi. A todos, GRACIAS, gracias por estar ahí, por la compañía, por las horas de terraza, las atenciones, los cuidados, los ánimos. Gracias!!!

A Vosotros.
.....malaria.... what is malaria?...